España y el tabaco.

España suma al año 52.000 muertes causadas por el tabaco.

Tomando como un consumo medio 11.5 cigarrillos al día observamos que el 70% de españoles fuman habitualmente tal cantidad a pesar de haber intentado dejarlo al menos una vez, frente a un 17% que ha intentado dejar este mal habito cuatro veces o más, sin éxito. Según una encuesta realizada a 9.045 personas de todo el país, más de la mitad (un 52.3%) apoyan un etiquetado genérico de los paquetes y un 51.6% defiende la prohibición de fumar dentro de un vehículo, sobretodo si dentro de éste van niños.
 Los datos nos muestran que sí somos partidarios de endurecer la ley antitabaco el problema es que gran parte de la sociedad española fuma y por tanto, se opone.
Se le preguntó al coordinador de la XVIII Semana Sin Humo en la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC), César Minué, qué pensaba sobre los datos obtenidos y él respondió que significaba un gran avance que la población estuviera tan concienciada y que las leyes antitabaco hubieran resultado efectivas.
 Se sabe que desde que se prohibió fumar en zonas públicas descendió notablemente el número de fumadores en España pero aún debemos continuar progresando para no estancarnos, explica Salvador Tranche, el presidente de semFYC. 
En países como Gran Bretaña se ha iniciado la prohibición de fumar dentro de los vehículos también con buenos resultados por lo que sería necesario hacer lo mismo en España. Otra medida llevada a cabo por el país es el empaquetado genérico de los cigarrillos, que disminuye el número de adolescentes fumadores. Minué piensa que la mejor manera de luchar contra el tabaquismo es aumentar el precio de éste un 10% e insiste en que la publicidad es una parte muy importante que debe tenerse en cuenta si se quiere concienciar a la gente, por lo tanto debería ser eliminada totalmente para evitar que se promueva de cualquier forma el consumo de tabaco.
Salvador Tranche defiende que el abandono de este mal hábito es una de las decisiones más importantes para nuestra salud ya que si se erradicara totalmente el consumo del tabaco las enfermedades derivadas de éste como lo son el cáncer de pulmón o la enfermedad obstructiva crónica pulmonar (EPOC) se darían en mucho menor porcentaje.
Los dos nos recuerdan que no sólo basta con tener iniciativa si queremos acabar con el tabaquismo, debemos crear una estrategia longeva y continua.
Además, en la encuesta también vemos que el 68% de los entrevistados sigue expuesto al humo del tabaco en las terrazas, por ejemplo, y el 36% piensan que la normativa antitabaco no se cumple correctamente.
Se calcula que el consumo de tabaco acabará con al menos, la vida de la mitad de sus consumidores, según datos, en 2030 el índice de mortalidad mundial por tabaco rondará los ocho millones de personas si no se intensifican las medidas antitabaco.
Por último, exponen que si una persona tiene la iniciativa de dejar de fumar, debe acudir a un centro de salud, allí un especialista le informará sobre qué pasos debe seguir para acabar con su mal hábito. Sólo los tratamientos farmacológicos han demostrado científicamente su efectividad, como el cognitivo-conductual, todo lo demás son simples placebos.
















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