Einstein publica la Teoría de la
Relatividad General en 1915 y en ella predice la existencia de ondas
gravitacionales, es decir, unas ondulaciones espacio-tiempo que se producen por
acontecimientos violentos como la explosión de una supernova o la fusión de dos
agujeros negros. Einstein ya sabía que las ondas gravitacionales eran muy
débiles y serían muy difíciles de
observar.
Estos días, David Reitze, director del
experimento LIGO, ha dado a conocer que han
detectado ondas gravitacionales. LIGO
es un Observatorio experimental de detección de ondas gravitacionales. La sigla
proviene de Laser Interferometer Gravitational-Wave Observatory
(Observatorio de ondas gravitacionales por interferometría laser).
La primera señal fue el 14 de septiembre
de 2015 y en los experimentos han intervenido varios laboratorios: detector de
Livingston (Lousiana), detector de Hanford (Washington), Instituto Tecnológico
de California (Caltech), MIT de Boston, es decir ha sido una labor de equipo.
En España, Alicia Sintes, investigadora del grupo de Relatividad y Gravitación
de la Universidad de las Islas Baleares también participa en este proyecto.
Según Stephen
Hawking se podrá mirar el Universo justo después del Big Bang. Este
descubrimiento supone una nueva manera de “mirar” el Universo porque un agujero
negro es negro y no emite luz, por lo que no se puede observar directamente,
pero las ondas gravitacionales sí que se pueden detectar.
Antes de este descubrimiento, en 2012, se halla el
bosón de Higgs. Sus descubridores, Englert y Higgs, fueron galardonados con el
Premio Nobel de Física de 2013, seguro que las ondas gravitacionales merecen
otro Nobel. Pero Einstein ya no lo puede recibir.
Sede de LIGO en Hanford (Washington).
Recreación de dos agujeros negros y ondas gravitacionales.
Pablo Pérez Lázaro
No hay comentarios:
Publicar un comentario