Unos científicos del National Physical Laboratory inventaron
el negro más puro hoy en día existente.
Este negro es una
sustancia llamada Vantablanck, se crea a 400ºC y se compone de nanotubos de
carbono, es decir, estructuras diminutas de carbono. Al ser tan oscuro, absorbe
aproximadamente un 99´9 % de la luz ya que en vez de reflejarla, se queda
atrapada y después se desvía.
Esta sustancia
se usa en toda la astronomía (incluyendo mejoras para telescopios y cámaras) y
en la esfera militar (para camuflajes). La NASA por ejemplo, la emplea para
sistemas de calibración en satélites, para controlar la calidad . La empresa de
Surrey nanosystemis fue más allá, y consiguió crear una pintura (spray) de esta
sustancia, con la que se puede cubrir cualquier objeto. El efecto óptico que
crea es muy curioso, pues lo que sucede es que el objeto rociado parece que no
tenga contornos y nuestro ojo humano que no puede distinguir lo que hay tras la
pintura, piensa que es un vacío.
Este producto no esta
a la venta, es solo para centros de investigación o universidades pero hoy
en día, también se está acercando al terreno del arte (sobre su uso en el arte,
hay mucha polémica (¿Por qué solo pueden conseguir esta sustancia determinad@s
artistas?)
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