Hoy en día, los científicos intentan descubrir alternativas para no contaminar, ya que cada año la emisión de sustancias químicas aumenta. Por ejemplo, en 2010, investigadores de la Universidad de Málaga, del Instituto de Ciencias Materiales de Sevilla y del Instituto Italiano de Tecnología, se dieron cuenta de que la piel del tomate podía hacer la función de las latas o plásticos conservadores de alimentos, porque podía transformarse en un plástico biodegradable. Esta transformación, es por sus propiedades; la piel de los tomates se compone de epidermis (como todos los frutos), donde se encuentra la cutina, una sustancia orgánica que produce el citoplasma (la célula que rodea el núcleo), la cutina crea el esqueleto del tomate, regula la salida del agua, lo protege del exterior y es una sustancia biodegradable y biocompatible. Para crear un plástico biodegradable con la cutina, se mezcla con alcohol, metanol y acetona, esta mezcla protege de la luz a los alimentos, los conserva, es resistente, orgánica, reciclable, no es tóxica y es inerte a cualquier sustancia química.
También han creado un ecosistema de esta sustancia que podría aplicarse en spray sobre cualquier superficie.
Quién sabe que será el siguiente descubrimiento.
http://www.diariodesevilla.es/economia/plastico-natural-contaminante_0_472752979.html
http://www.agenciasinc.es/Noticias/Bioplastico-de-piel-de-tomate-para-recubrir-el-interior-de-las-latas
https://www.libertaddigital.com/ciencia-tecnologia/ciencia/2015-05-20/inventan-un-plastico-para-envases-hecho-de-piel-de-tomate-1276548468/
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