Un grupo de astrónomos hallan un extraño asteroide, más allá de Neptuno, a 4.000 millones de la Tierra, en el cinturón de Kuiper. Tiene 300 kilómetros de diámetro y ha sido denominado 2004 EW95. Los científicos piensan que puede contener claves que tienen que ver con el origen del Sistema Solar.
Este descubrimiento destaca porque los científicos piensan que este fenómeno se formó en el cinturón de asteroides entre Marte y Júpiter y fue desplazado a miles de millones de kilómetros de su lugar de origen.
Según la actual ubicación de 2004 EW95, en la helada periferia del Sistema Solar, se da por hecho que un planeta migratorio lo ha expulsado hacia su órbita actual.
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